Dark Flame

Dark Flame es una dragona japonesa de 27 años. Ella nace en las cercanías de Asahi, Japón (en su mundo esta nación es llamada "El Imperio del Dragón"). Dark Flame es una dragona muy inteligente (con un gran conocimiento en diversos estilos de combate y manejo de las armas, aunque ella no considere como necesario esto último), bastante seria y fría, no le gusta para nada expresar sus sentimientos ante los demás, posee una gran fuerza y una excelente condición física (esto debido a la condición especial con la que nació), y dado su alto sentido de la justicia y el honor, ella fungió por algún tiempo como la “Protectora de Asahi”. Cuando el señor de Asahi fue asesinado, esa ciudad se convirtió en lugar plagado de corrupción y muerte, en donde los más desfavorecidos no tenían protección alguna ante los abusos de los así llamados “poderosos” (políticos, magnates de las nuevas industrias y militares), o esa era hasta que Dark Flame comenzó a recorrer las calles de Asahi. 

Ella comenzó a impartir justicia a la edad de 15 años, en muchos de sus primeros combates contra los perversos líderes de la ciudad ella salió con muchas heridas, pero esto no era algo que le preocupara, pues Dark Flame es una dragona vampiro y a lo que menos le tiene miedo es a la misma muerte. Fue en esa época cuando ella se confecciono un traje para ocultar su verdadera identidad y adopto el nombre de Dark Flame. La dragona lucharía por más de 10 años para limpiar las calles de Asahi del mal, pero no pudo lograrlo, de hecho, esta agotadora causa le quitaría al ser que más amaba en su vida, el señor Kurosawa, un hombre de avanzada edad, el cual se había encargado de cuidarla por varios años y que actuó como un verdadero padre para ella (él le enseño a leer y a escribir, e hizo que se interesara en las tradiciones del Antiguo Imperio). Abrumada por este suceso que no pudo evitar, ella huyo de Asahi.

Por los siguientes meses, ella estuvo andando de una ciudad a otro, hasta que encontró un hogar definitivo en Minami (la ciudad donde vive Akemi). Dado que Minami es un lugar tranquilo y con un bajo índice de criminalidad (esto no es sinónimo de que los crímenes cometidos no sean graves), Dark Flame puede gozar de una vida más tranquila, ella se integro como miembro de la policía de Minami (aunque solo entra en acción cuando la situación es demasiado grave y en verdad lo amerita). Dada su pasión por la lectura, ella a veces frecuenta la librería “Mirai”, aunque en ocasiones no llegue a comprar nada, Dark Flame va únicamente para escuchar el sincero y alegre saludo de bienvenida de Akemi Suzuki. 

Además, a causa de su sombría apariencia Dark Flame, la gente de Minami le teme un poco (y eso que desconocen el hecho de que Reiko necesita beber sangre para alimentarse), debido a esto, la dragona prefiere salir muy poco y la mayor parte de su tiempo lo pasa en las ruinas de una iglesia a medio construir, aunque ella no cree en la existencia un ser superior que controle y observe lo que pase en su mundo, el estar en ese lugar, le hace sentir una paz y una calma que la reconforta bastante.

Sus días grises se acabarían cuando conoció a Kimiko 'Kimi' Watanabe, pues la pequeña unicornio no le tiene miedo alguno a la dragona y cada vez que se topa con ella, siempre quiere hacerle plática a Dark Flame, cosa que trata de evitar (pero tarde o temprano hablara con Kimi, pues la unicornio sabe muy bien que tras esa oscura y fría coraza que se ha autoimpuesto Dark Flame se esconde una ser bondadosa y justa). 

Nota: El verdadero nombre de Dark Flame es Reiko, y es una de las cosas que más atesora en su vida, ya que es el único recuerdo que conserva de aquellos dragones que la engredaron. Además aún conserva un oso de peluche que le regalo el señor Kurosawa y al que nombro como “Kuma-san” (el cual fue uno de los pocos juguetes que ella llego a tener e incluso cuando se siente muy triste se duerme con este).